Cilento es como un enorme libro de historia, hecho por muchos capítulos: durante más de medio millón de
años, sin interrupción, el Hombre ha habitado esta tierra, dejando huellas de su paso por todas partes.
El resultado es un inmenso museo al aire libre: se pueden ver muy cerca templos griegos y castillos
provenzales, tumbas lucanas y frescos bizantinos, torres normandas y aragonesas y fuertes franceses,
fortificaciones angevinas y palacios catalanes.
Sin duda rutas insólitas y al mismo tiempo perfectas para el turismo cultural.